Fecha: 1-septiembre-2013
Bikers: José Antonio “Presi”, Romu, Miguel “Pescaroni”, José Esteban, Héctor Marin “Frijolito”, Mamel, Dani “Majillo”, José Carlos “Seco”, Andrés “Abuelo”, José Ignacio, Adrián y amigos del club que pedalean con otros colores: Daniel (cuñado de José Carlos), José Antonio de Pinseque, Eva, Javi Ciruelas y Cabrerizo.
Crónica: Después de lo bien que lo pasaron nuestros compañeros el año pasado por tierras de Borja en la ruta de la Garnacha y las muchas bondades que la gente nos había contado de esta carrera, decidimos apuntarnos masivamente a la IX edición de la carrera organizada por el BTT de Borja, a lo que ayudo sin duda alguna el saber que en la carrera nos iban a regalar una botella de Borsao Selección.
LLEGADA
Al igual que el año anterior, a Borja llegamos en dos grupos, el uno venido desde Zaragoza y otro venido desde Aniñón y Calatayud liderado por parte de la directiva del club: Romu, el Presi y José Esteban más dos coches de simpatizantes y familiares que quisieron acercarse para animar a Hector, el benjamín del equipo, en su primera competición oficial.
Tras la consabida recogida de dorsales y mochila de regalos con el vino de la tierra y de descargar y preparar las bicis, nos dirigimos a la salida. Muchos bikers ya en las primeras posiciones. Se coloca por los primeros puestos para quitarse estorbos en los primeros kilómetros, detrás de Daniel.
ETAPA
La IX ruta de la Garnacha 2013 se inicia a eso de las 9:00 h, más o menos, con un recorrido inicial neutralizado por las calles de Borja. Como es habitual en estas carreras se sale fuerte y al principio resulta difícil adelantar, pero poco a poco la gente se va estirando a lo largo de los primeros 10 kms que son de ligera subida. Por delante va Daniel el cuñado de José Carlos batiéndose el cobre con los PRO, luego va Héctor destacado y siguiéndole Dani “majillo” y un poco más atrás un grupito compuesto por Miguel, José Esteban, José Antonio (Pinseque) y José Carlos.

Llegamos al alto de las canteras, un cuestón que hace que los primeros corredores echen el pie a tierra y me adelantan Adrián, Mamel y Cabrerizo que iban pos detrás y un poco después me pasa tambien Eva que va con un amigo. Aunque voy bien no termino de coger un ritmo cómodo y me quedo descolgado también de ellos.
Coronada la primera dificultad de la etapa, llaneando se llega hasta a la primera senda, que resulta ser muy rápida y divertida, aquí recupero terreno y alcanzo a Eva ganando alguna posición. En la puerta del famosísimo Santuario de la Misericordia, casa natal del Ecce-Homo está instalado el primer avituallamiento y allí nos espera Mamel reponiendo líquidos y nos alcanza Andrés. Hay novedades por atrás “el Presi” ha pinchado en el kilómetro 7 y va con Romu muy atrás. Pequeña parada para comer e hidratarnos y continuamos los tres juntos con la subida que aún quedaba hasta coronar el alto de Belén.
Tras llanear unos kms nos lanzamos a la segunda bajada sin hacer el cabra, primero una senda y después pista hasta llegar nuevamente al valle, por donde el camino discurre entre viñas cargadas de garnachas que son la promesa de los buenos caldos de la tierra.
Al llegar al kilómetro 32 los recorridos corto y largo se separan, es entonces cuando Javi Ciruelas, un Santa Isabelino en Aniñón nos da alcance. Andrés que va cansado se plantea tirarse hacia la corta pero Mamel lo convence para que siga con la mentira mas famosa de los BTTeros: “venga que no queda nada”, o la tan usada: “una cuestecica y luego todo llano”. Nada mas lejos de la realidad, aun resonaban sus palabras en nuestros oídos cuando el camino se desvía en dirección a la Atalaya para coronar el Alto de Caragüeyes, ascendiendo por una pista entre pinos que termina en el parque eólico, con un respetable desnivel situado en torno al 7,5% de media.
Una vez coronamos Andrés y yo, recibimos los primeros embates del cierzo y la cosa parece ponerse difícil. Ya nos habían avisado nuestros compañeros que esa había sido la parte mas complicada de la carrera el año pasado por el esfuerzo que suponía el pedalear con el viento en contra, sin embargo y para nuestra sorpresa el trazado giraba repentinamente hacia el noroeste adentrándose en un encinar que nos protegía del viento, lo que nos permitía avanzar bastante rápido, así que Andrés y yo, dándonos relevos cortos como hacíamos por las tierras de Francia, llegamos rápidamente hasta situarnos sobre el pueblo del Buste, hacia el que descendimos por una senda muy divertida, con curvas de 360º.
A la salida de El Buste nos esperaba el tercer avituallamiento, con un nutrido número de aficionados locales animándonos. Andrés y yo aprovechamos para reponer líquidos de cara a la última parte de la carrera y a la salida del avituallamiento se produjo el incidente más reseñable de la carrera ya que el camino, que descendía rápidamente estaba algo peligroso debido a la grava suelta. En una de las curvas perdí de vista a Andrés que bajaba rápidamente detrás de mi y decido esperarlo, pero continua sin venir, como me empiezo a preocupar le pregunto al siguiente participante que pasa y me contesta que no ha adelantado a nadie con el mismo maillot que el mío, ahora si que estoy preocupado. Decido desandar el camino y como a trescientos metros me encuentro a Andrés saliendo de una zarza inmensa que le ha amortiguado en su caída, ayudado por otro participante. En este momento fue como tener cara a cara al Ecce Homo de Borja, todo lleno de espinas, rasguños y sangre… ni Cecilia con toda su buena voluntad podría haber arreglado tal desaguisado.
Ya recompuestos continuamos con la ruta rumbo a Borja, quedando solamente 18 kms de «todo» bajada, pues los huevos, si que es verdad que hay bajada, pero también hay unos cuantos repechos que fastidian bastante, pasamos cerca de la Estanca de la localidad y enfilamos el camino de Tudela que discurre huertos y casetas, lo que hace presagiar la cercanía de la localidad y por tanto de la meta.
Entrada triunfal al parque de Borja, con un nutrido grupo de aficionados del BTT Aniñón venidos desde el pueblo jaleándonos y reencuentro con el resto del club, esperamos todos juntos a que culminen la etapa Romu y el Presi que ha vivido su particular odisea por un pinchazo tempranero con abrazo de agradecimiento incluido con su “salvador”.
Puestos: DB 9º / HM 55º / JE 56º / IM 57º / DL 58º / AS 59º / CG 88º / AP 96º / JAC 120º / EE 139º / MG 140º / AM 180º / JM 181º / RS 205º / JAM 206º.
Ducha de rigor, comida de hermandad de bikers y familiares, y entrega de premios, en la que para sorpresa de todos Hector recibe el trofeo al mejor de su categoría, algo que a la postre serviría para su fichaje por el CC Zaragoza como joven promesa.
Felicitaciones para Hector y para todo el Club BTT Aniñón por los buenos resultados cosechados.
Post Etapa
Sin lugar a duda carrera preciosa, de las que hacen afición, tanto por el recorrido, como por la buena organización, a lo que contribuye sin duda el buen hacer de un gran número de colaboradores. Prometemos volver en próximas ediciones.